La Flor de la Vida es uno de los símbolos más enigmáticos y poderosos de la geometría sagrada. Este patrón geométrico ha sido venerado a lo largo de la historia por diversas culturas y continúa impresionando a estudiosos y espirituales en la actualidad. En este artículo, exploraremos qué es la Flor de la Vida, sus orígenes, su importancia en la geometría sagrada, su relación con figuras históricas como Leonardo Da Vinci y sus usos en la actualidad.

«Dios es el geómetra del universo»    -Platón-

«Las matemáticas son la más bella y exacta de las ciencias, porque sus leyes no son sino el reflejo de las leyes del intelecto divino.»    -Jorge Luis Borges-

¿Qué es la Geometría Sagrada?

Cuando hablamos de Geometría Sagrada, nos referimos a patrones universales que están presentes en todos los elementos de la realidad y que responden con armonía a reglas geométricas y razones matemáticas.

La geometría sagrada se basa en la concepción de que ciertos patrones y proporciones son inherentes al diseño del universo. Estos patrones se encuentran en la naturaleza, el arte y la arquitectura y se consideran fundamentales para la creación. Ejemplos incluyen la Flor de la Vida, el Cubo de Metatrón y la Espiral de Fibonacci. Estos patrones no sólo son estéticamente agradables, sino que también resuenan con la vibración del cosmos, creando un puente entre lo físico y lo espiritual.

Esta disciplina o campo estudia los patrones geométricos que se repiten en el universo, revelando una armonía y un orden que conecta una misma esencia repartida entre diversos elementos de la realidad.

Si existe un lugar donde la ciencia y la espiritualidad se encuentran, es en el estudio de la Geometría Sagrada.

La geometría sagrada estudia los patrones y formas geométricas que se encuentran en la naturaleza y el universo. La Flor de la Vida es uno de los símbolos más importantes de esta disciplina, ya que contiene los patrones básicos de la existencia y las leyes fundamentales del universo. La geometría sagrada utiliza la Flor de la Vida para explicar la interconexión de todas las cosas y como herramienta para la meditación y la sanación.

¿Qué es la Flor de la Vida?

La Flor de la Vida es una de las formas más conocidas de la Geometría Sagrada. Este símbolo sagrado está formado por 19 círculos superpuestos del mismo diámetro, entrelazados de manera uniforme simulando los pétalos de una flor. Este diseño crea una simetría armoniosa y se ha utilizado durante milenios como un símbolo de la creación y la interconexión de todas las formas de vida en el universo. La Flor de la Vida representa la estructura fundamental de todo lo existente, simbolizando la armonía y la perfección de la naturaleza.

Este patrón primigenio fue utilizado desde la antigüedad por diversas culturas, aisladas completamente unas de otras, lo que representa un misterio en sí mismo. Aún hoy en día continúa siendo un enigma su origen y múltiple presencia en culturas que difieren en tiempo y espacio.

Orígenes de la Flor de la Vida

El símbolo de la Flor de la Vida ha sido descubierto en numerosos lugares alrededor del mundo, lo que sugiere su importancia universal. En el Templo de Osiris en Abydos, Egipto, se encuentra uno de los ejemplos más antiguos y conocidos de la Flor de la Vida, que data de hace más de 6,000 años. Este símbolo también aparece en Israel, Turquía, China, India, Japón, Irak, España, México, Francia, Bulgaria, Escocia, Hungría, Polonia y Austria.

A continuación, veremos algunos de estos lugares donde su presencia es central.

Lugares Más Conocidos

Templo de Osiris en Abydos, Egipto

En una columna del Templo de Osiris en Abydos se encuentra grabada la Flor de la Vida. Esta representación es particularmente notable por la precisión con la que está grabada, como si hubiera sido hecha con un láser. Algunos estudiosos sugieren que este símbolo representa el Ojo de Ra, un símbolo de autoridad del faraón.

En la ciudad de Abydos, en Egipto, se encuentra el impresionante Templo de Osirión, llamado así por su dedicación a la deidad Osiris, dios de la muerte, la resurrección y la fertilidad, y es una figura clave en los mitos relacionados con la vida después de la muerte y el juicio de las almas. Este antiguo templo, situado detrás del templo de Seti I, está construido con piedra caliza, arenisca rojiza y granito, dedicado a la adoración y culto a Osiris.

Durante siglos, el templo estuvo enterrado bajo las arenas hasta que, en el siglo XX, los arqueólogos Flinders Petrie y Margaret Murray lo descubrieron accidentalmente mientras excavaban el templo de Seti.

Dentro del templo, al descender por una escalera de metal y mirar hacia la derecha, se puede observar la Flor de la Vida grabada en una de las piedras. La técnica utilizada para grabar este símbolo sigue siendo un enigma, y algunos especulan que podría haber sido realizado con algún tipo de láser, aunque no hay evidencia que respalde esta teoría, aparte de su apariencia. El origen y la función exacta de este símbolo en el templo aún son un misterio para los arqueólogos.

Ciudad Prohibida, China

La Ciudad Prohibida, ubicada en el corazón de Beijing, China, es un vasto complejo palaciego que sirvió como residencia imperial y centro ceremonial de las dinastías Ming y Qing durante casi 500 años. Este majestuoso palacio, ahora convertido en el Museo del Palacio, alberga innumerables obras de arte, arquitectura y simbolismo cultural, entre los cuales destaca la Flor de la Vida.

Dentro de la Ciudad Prohibida, la Flor de la Vida se encuentra tallada bajo las garras de los leones guardianes conocidos como Shishi o Fu-dogs. Estas estatuas, ubicadas a la entrada del palacio y en varios puntos estratégicos, simbolizan la protección y el equilibrio universal. Los leones guardianes siempre se presentan en parejas representando el yin y el yang. El león masculino sostiene una esfera que contiene la Flor de la Vida, simbolizando la supremacía y el conocimiento universal.

A lo largo de los siglos, la presencia de la Flor de la Vida en la Ciudad Prohibida ha sido un testimonio de la influencia de la geometría sagrada en la arquitectura y el diseño chino.

Golden Temple, India

El Golden Temple, también conocido como Harmandir Sahib, está ubicado en Amritsar, India, y es el lugar más sagrado de la religión Sikh. Este impresionante templo no solo es un centro espiritual, sino también un símbolo de la unidad y la conexión entre los seres humanos y el universo. La Flor de la Vida se encuentra representada en varias partes del complejo del templo, destacando su importancia y su influencia en la arquitectura y la espiritualidad del lugar.

En el Golden Temple, la Flor de la Vida se utiliza para simbolizar la unidad y la conexión espiritual de todos los seres vivos. Este patrón geométrico representa la estructura fundamental de la vida y la creación, y su presencia en el templo subraya la creencia en la interconexión de toda la existencia.

El Harmandir Sahib es un lugar de gran significado espiritual para los Sikhs, y la presencia de la Flor de la Vida refuerza su mensaje de unidad y conexión universal. Este símbolo, junto con otros elementos arquitectónicos y decorativos del templo, crea un ambiente que fomenta la contemplación y la elevación espiritual.

La Relación de la Flor de la Vida con Leonardo Da Vinci

Leonardo da Vinci, el genio del Renacimiento, se adentró en el estudio de la Flor de la Vida, analizando sus propiedades matemáticas y geométricas. Sus dibujos y anotaciones revelan su búsqueda por comprender este símbolo como un lenguaje universal que encierra los secretos del universo.

La Flor de la Vida no solo fue un objeto de estudio para da Vinci, sino que la integró sutilmente en obras como la “Mona Lisa” y el “Hombre de Vitruvio”, impregnándolas de armonía y belleza. Para él, este símbolo representaba la proporción áurea, la secuencia de Fibonacci y la perfección divina.

La fascinación de da Vinci por la Flor de la Vida contribuyó a su visión holística del mundo, donde arte, ciencia y espiritualidad se unían en una búsqueda por comprender la naturaleza y el lugar del ser humano en el universo. Él la utilizaba como una herramienta para explorar conceptos como la creación, la unidad y la interconexión de todas las cosas. Vio en ella un reflejo de la mente divina y un símbolo del potencial creativo del ser humano.

Usos Actuales de la Flor de la Vida

La Flor de la Vida, con su profunda significación espiritual y geométrica, sigue siendo relevante en la actualidad. Este símbolo no solo se encuentra en arte y arquitectura, sino que también se aplica en diversas prácticas modernas como el feng shui, así como en productos específicos enfocados en aplicar sus propiedades armonizadoras y energéticas. Uno de los usos contemporáneos que destaca es la integración en el producto Ormus Patagonia y en la indumentaria con geometría sagrada, que nos invita a recordar nuestra conexión con el universo en la vida cotidiana.

Feng Shui

En el feng shui, la Flor de la Vida se utiliza para mejorar la energía y armonizar los espacios. Este símbolo geométrico conecta con frecuencias que armonizan las energías y crean un ambiente tranquilo y agradable. Al colocar representaciones de la Flor de la Vida en hogares, oficinas y espacios de meditación, se puede fomentar una atmósfera de calma y positividad. Los practicantes de feng shui a menudo recomiendan colgar cuadros de la Flor de la Vida o utilizarla en decoraciones y amuletos para atraer buena suerte y protección.

Ormus Patagonia

Ormus Patagonia, ha adoptado la Flor de la Vida como parte integral de su identidad visual. Este símbolo se encuentra en cada botella de Ormus u Oro Monoatómico.

El logo de Ormus Patagonia incorpora la Flor de la Vida para reflejar nuestro profundo interés con la Conexión Universal, la Geometría Sagrada y la Frecuencia Creadora. Este símbolo representa la conexión de todos los planos de existencia, subraya la filosofía de promover el bienestar holístico y sintonizar con los patrones sagrados.

Este símbolo, al estar en proporción áurica y en geometría perfecta, interactua con la luz de una forma especial que se dice trae beneficios a nivel mental y espiritual. .

Conclusión

La Flor de la Vida es un símbolo ancestral que trasciende culturas y épocas, representando la conexión y la unidad de todas las formas de vida en el universo. Desde su aparición en el antiguo Egipto hasta su uso en la arquitectura china de la Ciudad Prohibida, este patrón geométrico ha servido como un recordatorio de la armonía y el orden natural. En la actualidad, su influencia perdura, especialmente en prácticas de feng shui y en productos modernos como los de Ormus Patagonia, donde se utiliza para elevar la frecuencia energética y promover el bienestar holístico.

La integración de la Flor de la Vida en diversos contextos modernos demuestra su continua relevancia y poder para armonizar y enriquecer nuestras vidas. Este símbolo no solo embellece y decora, sino que también encapsula una filosofía de interconexión universal y equilibrio energético, principios que son esenciales tanto en la espiritualidad como en el bienestar contemporáneo.